Poner buena cara y sonreir

sábado, 29 de octubre de 2011

Ya no quiero nada más de ti.

-Hola.
-¿Qué haces aquí?
- He... he venido a pedirte perdón, por todo.
- Es un poco tarde, ¿no crees?
- Lo creía, lo creía hasta que me di cuenta que es mejor tarde que nunca, no podía seguir viviendo mientras pensaba en todo lo que habías sufrido.
- Prefería que te lo hubieras callado, toda la vida si hubiese hecho falta.
- No, sé que no lo preferirías, tú no eres así, te conozco.
- Ah, ahora resulta que me conoces, ¿no? ¿Al igual que me conocías cuando me hiciste daño y no fuiste capaz de pedir perdón a tiempo? ¿Me conoces tan bien como antes?
- Mira, sé que estás enfadada, que...
- ¿Enfadada? No, estuve enfadada, ahora solo me das asco, tenerte enfrente es horrible, olvidarme de ti fue difícil, lo sabes, no entiendo que haces aquí.
- He venido a pedirte perdón, ya te lo he dicho. Joder lo siento, lo siento mucho, fui un idiota, un gilipollas, me comporté como un niñato, pero sabes que no era yo, lo sabes.
- No, no se nada, ya no sé ni quien eres, pero tampoco es que me importe, ahora lárgate.

No hay comentarios:

Publicar un comentario